Vayerá
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Conciencia Aplicada de la semana
Cada siete días, el cosmos nos obsequia
la oportunidad de "recibir"
una conciencia específica y a través de ella alcanzar nuevos niveles de
felicidad real y satisfacción de vida.
Esta semana
tiene una de las claves fundamentales para el éxito tanto en la vida material como en
el trabajo espiritual: el sacrificio.
¿Pero, cómo
se traduce a nuestro vida diaria éste
concepto? Sin duda el sacrificio es un precio muy caro que nos cuesta pagar. Mi
maestro Ricardo lo llamaba el sacro-
oficio de matar nuestro ego.
Cuándo
iniciamos una dieta ¿qué es lo primero que tenemos que sacrificar? Nuestro
deseo de comer. De lo contrario las posibilidades de éxito son nulas.
Si
deseamos ser mas productivos
seguramente tendríamos que sacrificar algunas horas que nos pasamos en Facebook
o en el watsapp.
Si deseamos ahorrar para salir
de viaje, seguramente tenemos que sacrificar algunas actividades que nos
gustan, de lo contrario nunca juntaremos para el viaje.
Si deseamos hacer la oración
de la madrugada tendremos que renunciar a algunas horas de sueño.
En fin, cada vez que deseamos alcanzar otros niveles de bienestar o
espirituales tenemos que estar
dispuestos a sacrificar algo para obtenerlo. De lo contrario no sucederá
nada nuevo en nuestra vida y el éxito seguirá posponiéndose.
El sacrificio es soltar
nuestro de deseo de recibir equivalente a un ego.
Esta semana, Abraham quién
vivía en la tierra de Mamré y que además era su maestro y mejor amigo; recibe la
instrucción del Creador de que se circuncidara, que simboliza la oportunidad de
elevarse espiritualmente. Los sabios nos
cuentan que Abraham pidió opinión a Mamré,
y este le contestó: “ Sí es lo que el Creador
te pide, aunque te produzca sufrimiento físico y no tenga sentido
hacerlo, debes hacerlo”. Otro episodio revelador se da cuándo al tercer día de
la circunsición cuando pasaba por los dolores mas fuertes, Abraham recibió la
visita de tres hombres ( que en realidad eran Angeles) y a pesar de su
incomodidad física se levantó y les brindo hospitalidad.
De éste relato podemos obtener
mensajes muy importantes: Mamré sabía que al elevarse Abraham, partiría su
mejor amigo y dejaría de ser su maestro.
Aún así sacrificando su deseo personal le dijo que hiciera lo que el Creador le
señalaba. ¿ cuántos de nosotros estamos dispuestos a dejar ir a alguien muy cercano por su propio
bien? O Bien que tan dispuestos estamos de dejar nuestras comodidades con tal
de ayudar a un extraño?
Ayer una alumna me preguntaba
que si al soltar o sacrificar, podemos obtener lo que deseamos, esto bajo la
idea de que muchas veces estamos tan aferrados a conseguir ciertos resultados
que en el momento que lo soltamos y dejamos ir entonces el cosmos nos lo entregará
finalmente. Este principio es válido y sucede muy cotidianamente; sin embargo
algo que también sucede y es maravilloso
experimentarlo, es que cuando sacrificamos nuestros deseos de obtener, de
pronto te das cuneta que en realidad ya no lo necesitas y desaparece muchos
sentimientos de frustración, ansiedad, inseguridad, etc.
Una
forma de sacrificio mas ruda se da cuando nos enfrentamos a circunstancias en
las que nos exponemos a la humillación por actos que hemos cometido, aceptar
con humildad dicha situación y estar dispuesto a enfrentarla también es una
forma en la que nuestro ego es sacrificado de una forma definitiva y curativa.
De salida me viene a la mente
la oración de Ketoret o del Incienso, es una oración que nos da una fortaleza
impresionante para los sacrificios ya que de lo contario hacerlo por nuestra
propia voluntad nos deja en desventaja ante la fuerza de nuestros propios
deseos del ego.
El
poder del sacrificio es impresionante y cada vez que efectuamos un
sacrificio de nuestro ego crecemos exponencialmente tanto en el mundo material
como espiritualmente.
“Que la conciencia de éste shabbat
nos permita recibir las luces que nos asistirán en nuestro camino de
regreso." shabbat shalom
Roger Castellanos
Centro de la Kabbalah Aplicada. Puebla, México